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Luis Alberto Sansón Vernaza junto a su novia.  |
Basta un segundo para cambiar toda una vida. En un abrir y cerrar de ojos, Luis Alberto Sansón Vernaza, un panameño de 31 años, se encontró a mitad del anunciado túnel del más allá y del cual regresó en vertiginosa sacudida, pero totalmente transformado. El impacto de su auto "Cavalier" contra la baranda del cruce bajando el puente de las Américas hacia la ciudad capital, lo mantuvo por dos meses en la cama de un hospital y le ha dejado marcas en la mitad de su rostro, que requieren una cirugía reconstructiva. La madrugada del domingo 1 de julio del presente año, Luis Alberto "Luigi", volvió a nacer, como él mismo lo asegura. De ese preciso momento, "Luigi" no recuerda nada. Sólo que venía, pasados unos minutos de las 5:00 a.m. de La Chorrera, donde había estado la noche anterior visitando unas amistades. "Venía solo, gracias a Dios", dijo.
Hoy, a tres semanas de haber salido del Hospital Santo Tomás, donde fue atendido durante todo este tiempo, aún dice sentirse confuso posiblemente por la cantidad de medicamentos que ha recibido. Quedó inconsciente. Los médicos, registrando su agenda que estaba en un auto de pérdida total, localizaron a su padre a quien prácticamente le dijeron: "Venga acá al hospital que su hijo está a punto de fallecer".
En el accidente, Luis Alberto perdió (en el lado izquierdo de su rostro) el ojo, el maxilar, dientes, las mitades del labio y la nariz. Los médicos, viendo cómo milagrosamente "Luigi" había salvado la vida, en el intento por salvarle un poco su presencia física le practicaron un colgado con piel pectoral, lo cual fue rechazado en parte por el organismo del joven.
Sin embargo, Luis Alberto impresiona con su optimismo y confía en recuperar pronto (con ayuda de Dios, la ciencia y la solidaridad el pueblo panameño) su rostro. Los médicos panameños le han asegurado a Luis Alberto que "si tuviera el dinero se pueden hacer milagros", ya que mediante varias cirugías plásticas y de reconstrucción, se le dotaría de un nuevo rostro. "Pero es una cantidad exorbitante", dijo el joven.
"El presupuesto, que dio el Dr. Jorge Cowes, es de B/.200 mil y las operaciones se practicarían aquí en Panamá, porque se pueden realizar fuera del país, pero serían más costosas", dijo Vilma Vernaza, una madre abnegada que intenta dar a su hijo esperanzas apoyándolo en la lucha por la vida. Luis Alberto, quien tiene fe en Dios, confesó que antes del accidente siempre tuvo al Creador presente en su vida por la formación que recibió en el seno familiar, pero ahora luego del accidente, siente la presencia Divina a lo largo de toda su existencia.
Para ello, su madre, junto a los dos hermanos de Luigi, llevan a cabo una campaña para reunir los B/.200 mil que le devolverían un rostro aceptable al joven que hace apenas dos meses atrás, gozaba de atractivo físico, salud y una vida por delante.
En ese renglón se abrió la cuenta 0429-01-05-23-6 en el Banco General donde cada centavo del pueblo panameño es un grano de arena que aumentará la esperanza del joven panameño. La novia de "Luigi", una joven colombiana con quien mantiene relación sentimental hace seis meses, se ha unido al dolor familiar demostrando abnegación y apoyo con una agenda de actividades para reunir el dinero que hace falta.
Con la cantidad señalada por los médicos, prácticamente se cubrirían todas las cirugías por el momento previstas, dijo la madre. "Muchos pensaron que al quedar así podría quitarme la vida, pero no. Yo amo mi vida y confío mucho en Dios", dijo el joven inyectado de optimismo, fe y agradecimiento por el apoyo que ha recibido de su familia y amigos, luego de la tragedia.
Hoy, Luigi ha suplantado la alimentación a base de líquidos por alimentos blandos. De las 209 libras que tenía antes del accidente, le quedan 165. Al no tener la nariz completa, dijo que no puede darse el lujo de 'pescar' un resfriado, ya que el área destrozada en su rostro es foco de infección. En su casa, su hermana se ha convertido en su enfermera particular. Los interesados en brindar su apoyo, también pueden llamar al teléfono 261-7434. |