En el partido de la jornada inicial del Grupo B, entre la Roma y el Dynamo Kiev de Ucrania, el árbitro Frisk fue agredido con un objeto arrojado desde una tribuna del estadio Olímpico de la capital italiana y el encuentro fue suspendido después del primer tiempo.
Minutos antes el sueco de 41 años había expulsado al francés Philippe Mexes, defensor del equipo italiano, por una infracción sobre el delantero del conjunto visitante Maris Verpakovskis.