La huelga de los profesores entra hoy en su quinta semana. Pasan los días y no se observan gestiones para acabar el conflicto. Gobierno y gremios docentes no ceden en sus posiciones y al final están fregando a miles de estudiantes de los colegios de secundaria.
Pareciera que la consigna es ver quién se cansa primero en vez de mantener abierto los canales de comunicación para lograr una solución al conflicto que ya sólo radica en temas económicos.
Ya los estudiantes llevan mes y medio sin recibir clases. Cuando retornen, será como empezar de nuevo. Luego vienen las fiestas Patrias y se relaja el proceso de enseñanza.
Es mentira que el tiempo de clases que se ha perdido será recuperado, porque la realidad es que casi en diciembre en los colegios no hay clases, porque se está en el proceso de graduaciones y las fiestas propias de la época.
Tanto el gobierno como la dirigencia de los docentes son responsables, que los alumnos que no tienen la suerte de asistir a planteles privados, reciban una educación mediocre.
Porqué en Panamá a veces hay tanta incapacidad. La respuesta está en la deficiencia de la enseñanza. Estudiantes que hoy no reciben el número de clases adecuada, mañana serán profesionales mediocres.
La situación requiere una actuación rápida del gobierno y de los gremios magisteriales, pero sin agendas ocultas, porque al final el pueblo no es tonto y sabe qué busca cada quién.