Más de 400 familias viven en condiciones precarias, bajo techos improvisados de zinc, madera y hasta cartón.
Las nueve barriadas se ubican en el corregimiento de Pedregal, en la ciudad de David, tampoco cuentan los servicios de luz y agua.
La mayoría de sus habitantes han emigrado del distrito de Barú, donde atravesaban por una grave crisis económica.
Para alumbrarse, las familias han optado por instalar conexiones brujas, por tierra y por aire, lo cual es un peligro en potencia, sobre todo para los niños, que en un descuido podrían verse afectados.
Rubén Guerra, edil del área reconoció la situación y explicó el tema para la legalización de los terrenos se mantiene a través del MIVI.