"¡Todavía ocurren milagros!" Fue la opinión de varios testigos del accidente de ayer al enterarse que la niña Yenibeth Chávez, que iba con su madre en el vehículo, resultó con leves rasguños.
Igual percepción sintieron con el caso de Efraín Antonio Bernal, cuyo vehículo Nissan quedó debajo del bus, pero el conductor resultó con leves rasguños.