La selección de Armenia es un equipo ultradefensivo que cimenta su fortaleza en una defensa de cinco y en su portero, el veterano Román Berezovsky, que milita en la liga rusa.
A lo largo de la historia, Armenia se ha enfrentado a España en cuatro ocasiones, con un saldo de cuatro derrotas, diez goles en contra y ninguno a favor.
Una muestra de la falta de tradición del fútbol armenio es que el mejor jugador de su historia, Yuri Djorkaeff, nunca llegó a vestir la camiseta nacional, ya que defendió los colores de Francia, con la que se proclamó campeona del mundo en 1998.
La suerte del equipo armenio parecía que había cambiado hace un año en la fase de clasificación para la Eurocopa al conseguir dos victorias seguidas.