Un dispositivo con forma de tampón, con dientes afilados y que lleva el nombre de "rapex" fue presentado en Sudáfrica con la intención de convencer a las mujeres de que es la mejor arma para vengarse de un violador.
El producto está dotado de unos ganchos que se parecen a los dientes de un tiburón y que se prenden del pene cuando alguien quiere forzar una relación sexual no deseada.
El "rapex" tiene forma de tampón y por dentro está hueco, aunque en las paredes internas existen una serie de minúsculos dientes que se enganchan al pene, y que sólo pueden ser quitados con cirugía menor, lo que permitiría identificar al presunto violador.
El hombre, además, se ve impedido de orinar.