Por lo menos 841 personas murieron en Bagdad, la gran mayoría pisoteadas o ahogadas a causa de un movimiento de pánico en un puente sobre el río Tigris durante una ceremonia religiosa chiíta, mientras que otras perecieron envenenadas o por disparos de morteros.
Un total de 816 personas, muchas de ellas niños y mujeres, murieron pisoteadas o ahogadas tras la estampida en el puente Al Aimah provocada por el rumor de que había terroristas suicidas con cinturones de explosivos en medio de la multitud de chiítas que marchaban en procesión.
Otras 323 resultaron heridas a causa del movimiento de pánico en el puente, según un nuevo cómputo de las fuerzas de seguridad. Centenares de zapatos abandonados y ensangrentados ponían en evidencia la magnitud de la tragedia.
"Aún estamos sacando cadáveres del río", añadió la fuente. Además de los muertos en la estampida, 25 personas fallecieron tras ingerir comida envenenada y sus cadáveres fueron llevados al hospital, agregó.
Esta es la jornada más sangrienta en Irak desde la entrada de las tropas extranjeras al país, en marzo de 2003.
TERROR: BAÑO DE SANGRE
Los muyahidines de Jaiech Al Taifa al Mansura (ejército de la comunidad victoriosa), un grupo armado sunita vinculado a la red de Al Qaeda en Irak, reivindicó los disparos de mortero que mataron a 7 personas e hirieron a 37 cerca de un mausoleo chiíta en Bagdad, donde se realizaba un peregrinaje religioso.