El presidente de EE.UU., George W. Bush, pidió al Congreso que modernice la ley que rige cómo los servicios secretos pueden acceder a las comunicaciones entre sospechosos de terrorismo.
Bush aseguró que la ley actual, de 1978 y conocida como "Ley de Supervisión de Datos de Inteligencia sobre Extranjeros", "se ha quedado muy anticuada".
Hoy día, explicó, los terroristas pueden usar teléfonos móviles e internet para comunicarse entre sí, reclutar militantes o planear atentados, gracias a tecnologías que no existían cuando la ley se concibió hace treinta años.
"Como resultado, nuestro país se ve perjudicado en su capacidad para adquirir los datos vitales", advirtió Bush.