Cuatro prisioneros detenidos en la prisión de Abu Ghraib y la viuda de uno que murió en cautiverio acusaron en una corte de Estados Unidos a dos firmas estadounidenses cuyos empleados trabajaban en la cárcel, afirmando que fueron parte de tortura y abusos.
La acusación presentada en una corte de distrito de Estados Unidos en Washington señala como responsables a las firmas CACI International and Titan Corp., que tenían empleados en la prisión como parte de un contrato con el Pentágono.
La ley para reclamos de agravios en extranjero, bajo la cual se ampara la acusación, permite acciones legales en cortes de Estados Unidos para casos de "violaciones de la ley de naciones o un tratado de los Estado Unidos".
Los iraquíes afirman que "fueron ilegalmente torturados por agentes o empleados de las firmas acusadas, quienes estaban contratados por Estados Unidos para proporcionar servicios de seguridad e inteligencia" a las fuerzas armadas estadounidenses.
La acusación reclama daños y perjuicios no especificados para los cuatro iraquíes y la viuda de otro más que murió en la prisión.