Veintisiete jóvenes resultaron heridos, dos de ellos de gravedad, por la explosión de una granada de mano en una discoteca de la ciudad de Linz, en el norte de Austria.
Los jóvenes, de edades comprendidas entre los 17 y los 22 años, oriundos en su mayoría de la antigua Yugoslavia, fueron alcanzados por metralla "que proviene de una granada, es casi seguro", indicó una portavoz de la policía judicial de Linz, Bettina Kreuzhuber. "Podría tratarse de un atentado, aunque todavía no estamos seguros", señaló el oficial. |