En la casa de Eleuterio sólo quedó un perro un trapiche y su ropa. Sus hijos están con otros familiares al conocer que murió atropellado por una mula. Hay luto, dolor y sólo alcanzan a pedir justicia. Tres menores de edad quedaron en orfandad.
La muerte de este humilde y trabajador campesino ha consternado a la comunidad. Eleuterio Sánchez, era un hombre de 63 años, dedicado a la agricultura y a sus tres hijos, desde que su esposa los abandonó.
Este hombre vivía en Juan Díaz de Antón con sus tres hijos menores de edad, una de ellas es discapacitada y precisamente se dirigía con su padre en la bicicleta al IPHE, el día del accidente.
Por el momento, la niña discapacitada está en el Hospital de Penonomé, recibiendo atención médica por las heridas que recibió.