Estudiantes de la escuela de Soloy, distrito comarcal de Besikó, reciben sus clases sentados sobre tablas, sillas de plástico prestadas, pedazos de concreto y hasta en el suelo.
Desde el mes de marzo cuando se inició el año escolar, estos niños estudian como pueden en el plantel educativo donde además de la falta de mobiliario, tampoco hay energía eléctrica ni agua.
La estructura, que comprende 7 aulas nuevas, fue edificada hace pocos meses y aún no ha sido inaugurada, pero a simple vista se notan algunas deficiencias, como la construcción de los baños al lado del que supuestamente es el comedor escolar
Según el maestro Husein Rodríguez, a diario los niños le manifiestan que se sienten cansados de dar clases sobre los pedazos de tabla, pegados unos con otros.
"Ellos no resisten ni dos horas dando clases así, porque como no tienen pupitres también tienen que escribir sobre sus piernas" mencionó el educador.
TAMPOCO TIENEN AGUA
La maestra Damiana Urribara, alegó que en la escuela no hay agua ni instalaciones para obtener el vital líquido, por lo que los estudiantes toman agua de donde pueden.
Sobre el tema, Ilka Ortega, directora de la escuela comentó que a pesar de haber hecho todos los trámites todavía los documentos que la acreditan para utilizar los recursos económicos del centro educativo no han llegado.
"Esta escuela tiene dos partidas, pero no me han autorizado la firma, desde el mes de mayo y aún los documentos parece que no han llegado a Panamá" dijo.
Por la cantidad de estudiantes, además de las nuevas instalaciones para la escuela, todavía se tiene que utilizar uno de los pasillos del colegio IPT de Soloy.
Pero a pesar de todos los problemas que tienen que pasar los estudiantes de Soloy para recibir sus clases, el entusiasmo en cada uno de ellos por ir a la escuela es algo gratificante.
PROBLEMA: 27 EDUCADORES
Para los docentes de esta escuela es frustrante que el plantel cuente con los recursos económicos; sin embargo, a la directora no se le ha autorizado la firma.