Las pretensiones del gobierno con los operativos mano dura son las de convertir a Panamá en el país "más seguro de Latinoamérica", así lo aseguró ayer el Ministro de Gobierno, Arnulfo Escalona, momentos en que hacía la presentación del proyecto de ley para el aumento de penas contra los menores delincuentes en el pleno de la Asamblea Legislativa.
Escalona, acompañado por el Consejo de Gabinete y el jefe de la Policía, Carlos Barés, solicitó urgencia notoria para la discusión del primero de tres proyectos de ley del Órgano Ejecutivo para combatir la delincuencia.
El documento busca incrementar las penas contra los menores infractores de 7 a 20 años y establece la obligatoriedad del cumplimiento de la condena en un centro penitenciario del país.