El proyecto de soterrado o entierro de cables, que busca cambiarle la imagen a la ciudad de Panamá, tendrá una inversión de $38.3 millones, confirmó la administración de la Autoridad Nacional de los Servicios Públicos (ASEP).
La primera fase incluye sectores como el área bancaria, la avenida central de Santiago, provincia de Veraguas, Calle 4ta de David, provincia de Chiriquí, Zona Libre de Colón , la línea del Corredor Sur y el Aeropuerto Internacional de Tocumen, por ser consideradas zonas saturadas.
En días recientes, la ASEP exigió a las empresas de telecomunicaciones etiquetar el cableado y ordenar aquellos lugares que representan un peligro para los transeúntes y conductores.
Vencido el plazo, ahora corresponde a esta entidad , evaluar si las empresas cumplieron con lo solicitado el 24 de marzo, de lo contrario, se tomarán acciones.
Las empresas estaban comprometidas a realizar un inventario de cables en las zonas declaradas como saturadas.
En dicho informe debían detallar la cantidad de cables por poste, propietarios de los mismos, rollos de cables o reservas en los postes, cables ociosos o sin servicio, así como aquellos cables sin contrato. A nivel nacional, existen registradas cerca de 36 compañías de comunicaciones y electricidad que utilizan esta forma de distribución para su servicio.
El administrador de la ASEP, Denis Moreno, explicó que en los lugares donde no haya saturación de cables, estos se mantendrán sin mayores problemas, pero que debido al aumento de cables en el país, sobre todo en la capital, es necesario pensar en el soterramiento de los cables.