La introducción ilegal y el uso desmedido de sustancias químicas, especialmente dentro de las áreas rurales, en donde las prácticas agrícolas, son muy comunes, alertaron las autoridades del Ministerio de Salud.
Problemas relacionados con estas situaciones han sido identificados durante los últimos días en el distrito de Alanje.
Carlos Martiniz, director de Saneamiento Ambiental del Ministerio de Salud, explicó que existen disposiciones que establecen un límite de seguridad de 50 metros de distancia desde los cultivos hacia las viviendas.
La medida tiene como propósito mantener un área de seguridad para evitar el contacto con la piel y con el sistema respiratorio de las personas que residen en las cercanías de las áreas de cultivo.
Sobre las inspecciones, Martiniz comentó que para poder determinar el espacio, se debe evaluar primero el terreno para considerar si se están cumpliendo los parámetros.
El funcionario apuntó que la distancia, la seguridad y el margen deben ser estrictamente cumplidos, para bienestar de los seres humanos y el buen desarrollo de las prácticas agrícolas.
Señaló que muchos de los problemas de intoxicación y otros que se relacionan con el uso de los químicos, se debe a que a las casas distribuidoras no atienden las recomendaciones y técnicas de aplicaciones.
Indicó que otros de los problemas ocurre porque muchos de los artículos que se utilizan en los campos nacionales, entran a Panamá ilegalmente, sobre todo porque existen un cantidad considerable que pasos clandestinos que permiten la entrada de sustancias que muchas veces no tienen registro de uso a nivel nacional. Ese sentido, las autoridades de Salud hacen el llamado a los agricultores para estén alertas ante la entrada ilegal de estos productos y denuncien a los involucrados. Apuntó que cuando se comprueban faltas en el uso de las sustancias químicas se pueden aplicar medidas como suspender la actividad agrícola, y hasta sancionar por el incumplimiento en la normativa.