Jared Borgetti pasó de villano a héroe y un frentazo suyo le dio ayer a México un notable triunfo 1-0 sobre Brasil, que le clasificó a las semifinales de la Copa Confederaciones.
Borgetti falló dos veces en el suplemento la oportunidad de meter un penal, el cual había convertido en primera instancia. Pero se redimió al marcar el gol de la diferencia a los 59.
Fue todo lo que necesitó México, que posteriormente se echó atrás para defender a capa y espada el gol frente a un Brasil desdibujado sobre el final.
Aparte de la clasificación, la victoria le supo también a revancha a México, al cobrarse la goleada 4-0 sufrida hace un año en la Copa de América de Perú, y que los mandó a casa en cuartos de final.