Hubo de todo: gritos, empujones y hasta "flateos" de llantas, durante el primer día de paro, el cual -según la dirigencia- fue apoyado en un 90%.
Mariano González, palanca de la piquera de Veranillo, y uno de los más críticos al proyecto Transmovil, resaltó que "la medida se mantiene firme", y esperan paralizar el 100% de las unidades en el día de hoy.
La paralización del servicio trajo consecuencias para usuarios y transportistas, ya que además de las pérdidas económicas que calculan entre 7 y 8 millones de dólares, en la 24 de Diciembre y Tocumen se dieron fuertes enfrentamientos, los cuales provocaron que los conductores Juan Sanjur y Tiberio Rodríguez fueran detenidos.
En horas de la mañana hubo manotazos entre pasajeros y "palancas", ya que estos últimos se negaban a prestar el servicio y hacían que aquellos buses que no respaldaban la medida, bajaran los pasajeros o corrían el peligro de "flatearles" las llantas.
El dirigente Mario González volvió a criticar a la dirigencia de la piquera de Pedregal, y anunciaron que hoy les trancarán el paso de ser posible en los predios de El Parador a los que insistan en prestar el servicio.
Para evitar los tranques, el gobierno coordinó el uso de los Corredores Norte y Sur sin el cobro de peajes. La mayoría de los autobuses que brindaron el servicio utilizaron esas vías para circular. En horas de la tarde, varias paradas como la de la Plaza 5 de Mayo estaban colmadas de pasajeros.