Holanda recuperó a su delantero estrella Robin van Persie, y tiene puestas muchas esperanzas en que pueda formar en Sudáfrica un ataque efectivo junto a Robben, si supera sus problemas de rodilla, Sneijder, Huntelaar o Van der Vaart.
Van Persie parece estar recuperado de la lesión de ligamentos del tobillo derecho que sufrió en noviembre y le dejó cinco meses en el dique seco, puesto que fue el autor de los dos goles del combinado "naranja" en el partido de preparación que jugó ante México el pasado 26 de mayo.
Pero el seleccionador Bert van Marwijk no gana para sustos. Ahora su problema es el frágil Arjen Robben, que no viajó ayer con la "orange" a Sudáfrica para someterse a pruebas médicas de la lesión de la rodilla izquierda que sufrió en el amistoso que Holanda ganó a Hungría por 6-1, dos de los goles obra del delantero del Bayern.
"Lo de Robben no tiene buena pinta", admitió Marwijk.