Jalid Sheij Mohamed, el cerebro de los ataques del 11 de septiembre quería ser un súper terrorista, que entre sus planes figuraban volar el Canal de Panamá, y matar a Bill Clinton, al presidente de Pakistán, Pervez Musharraf, y al Papa Juan Pablo II.
Mohamed, quien ayer compareció ayer por primera vez ante un tribunal militar en la Base de Guantánamo, se atribuyó la responsabilidad "desde la A a la Z" por los atentados del 11-S. Este hombre vivió en Carolina del Norte y estudió en sus universidades, pero su rechazo a la alianza de Washington con Israel le llevó a idear, un atentado que cambió el mundo.
El acusado, de 43 años, asumió su defensa y dijo que quiere ser condenado a muerte para convertirse en mártir.