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En contraposición a la difícil tesitura en la que se encuentra Engel  |
A medida que se acerca el saque inaugural de la Copa Mundial de la FIFA Corea/Japón 2002(tm), el seleccionador polaco, Jerzy Engel, se está metiendo en un buen lío. En mayo de 2002, su contrato ha sido ampliado por otros dos años, pero su decisión de no incorporar al mediocampista Tomasz Iwan (Viena) en la alineación definitiva y el subsiguiente conflicto interno causado por la controvertida selección de jugadores, no augura nada bueno para Engel. Su situación se parece mucho a la del ex seleccionador coreano Cha Bum-keun durante Francia 1998, cuando reclamó autoridad absoluta para seleccionar su escuadra definitiva.
En contraposición a la difícil tesitura en la que se encuentra Engel, el actual seleccionador de Corea, Guus Hiddink, se está ganando el reconocimiento y el apoyo incondicional del pueblo coreano por haber revolucionado y elevado el nivel de juego de su selección nacional. A modo de preparación para su primer partido, el 4 de junio contra Polonia, Hiddink se concentró en desarrollar un estilo moderno y conjuntado que contrasta con el juego tradicional polaco centrado en los delanteros.
Después de una ausencia de dieciséis años de la Copa Mundial de la FIFA, hay muchas razones para que Polonia se sienta confiada acerca de sus posibilidades de entrar en la lista de los dieciséis candidatos al título. En primer lugar, cuenta con futbolistas de categoría internacional, como Emmanuel Olisadebe -quien, tras convertirse en el máximo goleador de Nigeria en 1990, se naturalizó ciudadano polaco en 1999- o el guardameta del Liverpool Jerzy Dudek, entre otros. Como potencia del Este de Europa, Polonia acude a su sexta participación en un torneo mundialista. Dados sus pasados logros en el torneo, no cabe duda de que constituye una amenaza considerable para la selección coanfitriona.
En cuanto al comentario del seleccionador Engel de que Polonia quedará primera de grupo y pasará a la siguiente ronda eliminatoria, Hiddink se ha limitado a desecharla. |
