El último adiós al niño Derians, quien murió en el río Palmera, junto a su madre, la educadora Doris Gough, fue doloroso.
Las honras fúnebres se realizaron el domingo en la Iglesia Adventista del Séptimo Día, de Isla Colón.
El templo se quedó pequeño ante la asistencia de familiares, vecinos y amigos de la familia Gough Dixon.