Rufina Camarena, de 77 años, no ha dejado de orar desde la noche del lunes, cuando una mula quedó metida dentro de su vivienda en Quebrada Ancha, Colón.
"Yo estaba cocinando y escuché un estruendo. Pensé que era un rayo, sin embargo, cuando me moví hacia delante, unas enormes alcantarillas estaban en mi sala", dijo Rufina.
La 'abuelita', que vive sola en esa casa que se destruyó con el accidente, ha quedado mal de la presión producto de ver cómo quedó su vivienda muy humilde, la cual levantó con sacrificios.
Rosa Valdés, hija de Rufina, dijo ocurrió un milagro, porque su mamá está con vida a pesar de que la mula entró a la casa.
Ella vive al lado. Allí escucharon el estruendo y cuando salieron a ver, se espantaron.
Según testigos, la mula cayó desde el proyecto que está enfrente y fue a dar a la casa de Rufina.
Los encargados de ese proyecto-según la afectada-se comprometieron a construirle su vivienda.