El Gobierno de Quito llevará a la "justicia internacional" el caso del ciudadano ecuatoriano Franklin Aisalla, el cual considera que fue "asesinado" tras la incursión militar colombiana contra un campamento de las FARC, afirmó ayer el ministro de Seguridad Interna y Externa, Gustavo Larrea.
En un encuentro con medios extranjeros, Larrea repitió las dos condiciones de Ecuador para reanudar las relaciones con Colombia: "Un compromiso claro de que no se va a volver a violar el territorio ecuatoriano" y que "cese la campaña mediática" de desprestigio que el Gobierno de Quito considera que lleva a cabo Bogotá contra él. Además reiteró que hay otros tres supuestos guerrilleros de las FARC muertos en el campamento de Angostura, según forenses, fueron "asesinados" por fuerzas colombianas.