Estudiantes universitarios de diversas organizaciones realizaron una jornada de protesta de aproximadamente tres horas, donde el plato fuerte fue la quema de un muñeco con el rostro del presidente Martín Torrijos.
Los estudiantes protestaron por la expulsión por un año de Martín Castillo y Johnny Hughes, quienes fueron identificados como partícipes en los desórdenes que se dieron hace más de una semana en los predios universitarios.
Los manifestantes se tomaron un paño de la vía y con pancartas en contra del Gobierno y de las autoridades universitarias, hicieron la protesta, la cual podrían repetir en lo que resta de la semana.
Incluso, el abogado Javier Víquez, en representación de los estudiantes, intentó presentar un recurso de ilegalidad en contra de la expulsión de ambos universitarios, pero el mismo no fue recibido por las autoridades de la Alta Casa de Estudios.
En esta protesta el estudiante de sociología, Marx Horabuena, sufrió fuertes quemaduras en su brazo izquierdo, cuando le explotó una bomba.