Lynndie England, la soldado de EU fotografiada riéndose mientras sostenía con una correa a un prisionero iraquí desnudo, dijo que sus jefes le indicaron que posara en la foto.
Las fotografías en la prisión de Abu Ghraib, cerca de Bagdad, conmociaron a la opinión pública mundial y representan un serio revés en los esfuerzos de Washington para estabilizar a Irak.
"Ellos nos dijeron: Vaya, lo están haciendo bien, sigan", aseguró la soldado de 21 años a la televisora CBS de Colorado en una entrevista desde Fayetteville (Carolina del Norte).
England acaba de regresar a Fort Bragg (Carolina del Norte) desde Irak debido a un embarazo de cuatro meses.
Cuando se le preguntó quién dio la orden England indicó a "personas en mi cadena de mando". La mujer admitió que en ese momento pensó que se trataba de "algo extraño". El 7 de mayo fue acusada de maltratar a un prisionero.
Al ser consultada si los prisioneros iraquíes eran tratados aún peor de lo que se vio en las fotos, la soldado contestó afirmativamente, pero se abstuvo de dar más detalles por consejo de su abogado que negocia su caso.
DEFIENDEN INTERROGATORIOS
Por su parte, el secretario de Defensa Donald H. Rumsfeld defendió las técnicas de interrogación que usan los estadounidenses en Irak.
Rumsfeld, ante un comité del Senado, dijo que abogados del Pentágono habían asegurado que eran perfectamente aceptados métodos como privación de sueño y de alimentos, y colocación de presos en posiciones incómodas.
El jefe del estado mayor conjunto de los Estados Unidos, el general Richard Myers, dijo también que las normas exigen que los presos sean tratados humanamente.