El presidente electo de Francia, Nicolas Sarkozy, enfrentó una ola de críticas pero se negó a disculparse ante denuncias de que su paseo post electoral en un yate de lujo fue indecente y escandaloso.
Sarkozy, de 52 años, se llevó a su esposa e hijo a un recorrido alrededor de Malta un día después de su triunfo electoral.
La victoria del conservador trajo varios incidentes en donde unos 1, 400 vehículos han sido quemados en Francia, debido al rechazo de los jóvenes inmigrantes a sus políticas radicales.