La norteamericana Debra Ann Ridgley identificó en una serie de fotografías al colombiano Didier Osorio, presunto asesino de la también estadounidense Toni Grossi Abrams, reveló el abogado Donatilo Ballesteros.
Ballesteros alegó que Debra es inocente y que fue obligada por Osorio y por el también colombiano Camilo Castro, a abordar un taxi en la que se transportó la maleta en la que fue metido el cadáver de Toni.
Grossi fue asesinada en su apartamento en el edificio Atlantis, ubicado en vía Veneto, tras sostener una disputa con Debra y en la que intervino el colombiano Didier, quien era novio de la nieta de la señora Ridgley.