Una vez más Beibis Mendoza se presentó a una conferencia de prensa para promover el combate de este 29 de abril en Figali Convention Center.
La gran diferencia con las veces anteriores es que ahora muy pocos le sacaron una expresión y cuando le llegó la hora de hablar, lo que dijo fueron pocas palabras.
A mi en lo personal me da a entender que le ha dado miedo o "Araña-Fobia", una enfermedad que se produce cuando se le tiene pánico a las arañas.
Más asombrado quedé cuando le llamé personalmente para obtener una fotografía para este diario de ambos boxeadores frente a frente.
No había nadie ya, la sesión de fotos había pasado, pero cuando ambos se vieron, el colombiano tímidamente dejó escapar su mirada hacia el suelo...No quiso darle la cara a "La Araña", como si le tuviera miedo.
Recordé en ese preciso instante, ¿le pasará eso cuando este sólo con "La Araña" el día 29 en el ring del Figali?".
Faltan pocos días para la esperada pelea, pero a mi entender, ya Beibis ha empezado a tener la presión del público y la prensa que siempre lo hemos cuestionado.
No lo pude creer, lo de ayer fue simplemente un gesto de temor, al ya acercarse el anhelado combate.
Las veces anteriores que Beibis hablaba y hablaba, yo me preguntaba ¿Porqué habla tanto?...Ayer quizás lo comprendí.
Señores les digo que sentí y vi en sus ojos miedo escénico, eso que se produce cuando se acerca la hora de actuar en algún lugar.
HABLANDO DE "EL LOCO"
Dejando a Beibis ya a un lado...La otra pelea de título el 30 de abril, la veo favorable para Vicente Mosquera.
Va a enfrentar a u rival que es campeón hace años ya, pero con la gran ventaja de llegar a esta pelea sediento de triunfo.
Ese es "El Loco", un púgil que nunca ha sido noqueado y que es uno de los que más coraje tiene a la hora de pelear.
Creo que puede regresar con una faja colgada a su cintura si pelea con inteligencia y mucha sabiduría.
Tiene que boxear seis asaltos bien con laterales,"pai, pai y no estoy" y luego el cansancio obligará al tailandés a rendirse a merced de nuestro boxeador.
Es la única fórmula para ganar.