Los Yanquis de Nueva York inauguraron, oficialmente, su flamante nuevo estadio de 1500 millones de dólares con el abridor mejor pagado en toda la historia del béisbol en el montículo, pero también se quedaron con la mayor humillación de su historia al perder por paliza de 10-2 ante los Indios de Cleveland.
Después de llegar a la parte alta del séptimo episodio con la pizarra empatada a 1-1, los Yanquis vieron cómo el bateo explosivo de los Indios hizo acto de presencia contra los relevistas dominicanos José Veras y Dámaso Marte a los que destruyeron con nueve carreras limpias.
Los 48, 271 fanáticos que se dieron cita en el nuevo Yankee Stadium no podían creer lo que estaban viendo, pero la realidad era que los Indios (3-7), que sólo habían ganado un partido fuera de su campo, humillaban al equipo supermillonario del béisbol profesional de las Grandes Ligas.
El campocorto dominicano Jhonny Peralta pegó doble impulsador de dos carreras en el séptimo episodio contra su compatriota Veras y siguió Grady Sizemore con un 'grand slam' por los asientos del jardín derecho ante los lanzamientos de Marte.
El primera base venezolano Víctor Martínez también pegó jonrón solitario para cerrar el racimo de las nueves carreras que anotaron los Indios y ya forman parte de la historia del béisbol y del nuevo Yankee Stadium, construido enfrente del mítico parque, donde Babe Ruth inmortalizó su nombre y el de su equipo.
El duelo de abridores entre ex compañeros, protagonizado por Cliff Lee y C.C.Sabathia iba a caer del lado del primero que se llevó la victoria.
Lee (1-2) espació siete imparables con una carrera limpia permitida, regaló tres boletos y abanicó a cuatro bateadores para quedarse con el triunfo, el primero de la temporada.
Sabathia, que lanzó por primera vez con el uniforme oficial de rayas negras y blancas de los Yanquis, vio cómo se tuvo que ir ante su ex equipo sin conseguir la victoria después de lanzar cinco entradas y dos tercios.