La segunda parte de la comilona de la paella del Viernes Santo en Punta Barco se realizó ayer en un restaurante de Vía Argentina, donde el ex ministro Roosevelt "Lito" Thayer, volvió a ser el anfitrión de un grupo selecto de invitados entre los que destacaban los perredistas Ernesto Pérez Balladares y Carlos Duque y los opositores José Raúl Mulino y Miguel Antonio Bernal.
La ex presidenta Mireya Moscoso, supuestamente fue invitada, pero no se presentó, porque cumplía agenda política.
Pérez Balladares calificó el encuentro como una reunión de viejos amigos, por lo que rechazó se tratara de una "conspiración" contra la candidata Balbina Herrera. El expresidente dijo que el PRD con su capacidad de movilización puede dar un giro de timón el 3 de mayo a los resultados que reflejan las encuestas, pero que la situación electoral no pinta fácil para ningún bando (gobierno y oposición).
Destacó que la intromisión del factor Murcia en la campaña PRD no le beneficia al colectivo. Entre tanto Carlos Duque, presidente vitalicio del PRD resaltó que Balbina es su única candidata a la Presidencia y que una invitación a almorzar paella no lo iba a hacer cambiar de opinión.
Pérez Balladares resaltó que hay mucha contradicción en torno al caso Murcia. La Procuradora Ana Matilde Gómez dijo que le informó el noviembre al mandatario Martín Torrijos lo de la custodia de agentes del SPI a Murcia y el jefe del Ejecutivo expresó en marzo que no sabía nada de eso; sin duda "alguien está mintiendo" añadió.
José Raúl Mulino llegó al encuentro en compañía de Bernal y, declaró que fue invitado a un almuerzo sin mayor connotación política. "Yo vengo a almorzar, no vengo a cuadrar ni a torcer brazos a ningún PRD que apoye a Martinelli", dijo el presidente del opositor Unión Patriótica (UP).
Entre los invitados estaban: Raúl Montenegro, "Rumba" Alfaro, Priscila Valenzuela, Mario Boyd, Jorge Chandeck, Carlos Vidal, Papito Arosemena, Pedro Pereira. A diferencia de la primera comilona, Mitchel Doens y Francisco Cárdenas no fueron invitados por Thayer, según dijo, porque "se portaron muy mal después de la paella del fin de semana".