La Policía Nacional capturó anoche al colombiano John Bryan Buitrago, de 41 años, sospechoso del asesinato de los hondureños Juan Pablo Fonseca y Carlos López, cuyos cadáveres decapitados, fueron encontrados el 4 de marzo en la carretera entre Gualaca y Chiriquí Grande.
Bryan Buitrago fue detenido en Atlapa, mientras asistía al concierto del cantante mexicano Alejandro Fernández.
El colombiano era buscado por casos de narcotráfico y su captura es un gran logro para la Policía, reveló un vocero de esa institución.
Trascendió que Buitrago se hospedaba en diversos hoteles de la capital. La decapitación de lo hondureños se produjo, porque éstos -para evitar ser detenidos. arrojaron al mar un cargamento de cocaína, pero los narcotraficantes colombianos no les creyeron esa versión, por lo que pagaron con su vida.
