¡Un día como hoy!
De esos que han quedado marcados en la historia de nuestra pelota.
Contaba el historiador santeño, Domingo "Mingo" Castillo, que el béisbol siempre recordará a Olmedo Solé, ese guerrero de la pelota que "murió con el uniforme puesto".
El 27 de marzo de 1956 en el estadio de Almirante, Olmedo Solé corrió del plato a la inicial tras sonar un roletazo entre tercera y campo corto. Cuando pisa la inicial, el árbitro lo declara "safe", logrando el primer imparable del partido y el último de su vida.
Con las "botas puestas" fue llevado al hospital, su cuerpo inamovible era trasladado rápidamente, pero no se pudo evitar lo desagrable, luctuoso y hasta desgarrador.
"Arteriosclerosis precoz" cita en su libro el historiador Ramón G. Pérez Medina. "El corazón colapsó debido al esfuerzo físico excesivo", decía en su obra Historia del Béisbol Panameño.
"Ya el tenía una advertencia sobre la no realización de grandes esfuerzos", dijo Mingo Castillo. "El equipo se retiró, Colón fue campeón, pasaron dos días para el traslado del cuerpo de Olmedo Solé a Las Tablas. Viajaron por mar, hasta Colón en unas aguas turbulentas", agregó el comunicador santeño.
OVACION DE DOLOR: 27 DE MARZO DE 1956
Esa noticia fue recibida en un total silencio por la afición santeña , que con pocos radios encendidos sufría una pena inolvidable.