La Comisión de Comunicación y Transporte aprobó en primer debate un proyecto que adiciona un capítulo a la ley de inspección vehicular, con el propósito de impedir las malas prácticas de algunos talleres que expiden certificados falsificados y que llevan a cabo revisados sin contar con las instalaciones necesarias que permitan garantizar la seguridad que requieren los usuarios.
De acuerdo con el diputado Marcos González, existen supuestos talleres que en realidad son galeras por donde no cabe un camión, pero que en cambio aseguran realizar el supuesto revisado de los pesados vehículos, con lo que se pone en peligro la vida de muchas personas y se ocasionan los sabidos accidentes de tránsito.
Dijo que el polémico aumento a B/40 del costo del revisado vehicular se dejó a criterio de los talleres para que se regulen ellos mismos.