Para el 2013, en Panamá habrán unos 4,200 pacientes que sufrirán de insuficiencia renal crónica, lo que significa que el costo que deberá invertir el Estado en estos pacientes, será de unos 100 millones de dólares, informó ayer Felipe Rodríguez, especialista en Nefrología de la Caja de Seguro Social.
Para David Ocalagán, representante de la Fundación que lleva su mismo nombre, estas cifras "son alarmantes, porque hasta la fecha en el país existen unos 1,500 pacientes que sufren de esta enfermedad".
Frente a esta realidad, la subdirectora de la región metropolitana de Salud, Justina de Suman, resaltó la importancia de establecer una campaña de salud, dirigida hacia la prevención primaria de la enfermedad.
La doctora agregó que las causas de las enfermedades renales crónicas son multifactoriales, entre las cuales detalló: los malos hábitos alimenticios (comer comida chatarra, sodas, etc), las infecciones crónicas renales, no tomar agua, el alcohol, el tabaquismo, el estrés y el uso de analgésicos sin prescripción médica, como acetaminofén e ibuprofeno.