El 28 de febrero de 1954 salió a la venta en Nueva York el primer televisor a colores con el sistema de transmisión análoga NTSC. El modelo fabricado por Westinghouse costaba $1,295, lo que ajustado a la inflación, serían $10,600 actuales. Un modelo más barato de la compañía RCA salió al mercado en abril del mismo año.