Unos cien activistas de la minoría hindú fueron detenidos ayer en Malasia por organizar sin permiso una protesta contra un libro de lectura obligatoria en la escuela que, a su juicio, ofende al colectivo, informaron los medios locales. La concentración iba a tener lugar al mediodía, cerca de las famosas torres Petronas, pero la Policía acordonó la zona e impidió el paso a cualquier persona no autorizada.
Poco después, unos 50 activistas se congregaron en un templo hindú para reclamar sus derechos antes de ser dispersados por agentes antidisturbios.