Dos hombres de disputarán hoy el control del poder en Cuba, cuando se reunan los integrantes del Consejo de Estado de Cuba, considerado como el máximo órgano de poder de esta nación caribeña, que necesita llenar con urgencia el vacio dejado por la renuncia de Fidel Castro.
Para ocupar este espacio, en primera fila se encuentra el jefe del Ejercito, Raúl Castro, un veterano de Sierra Maestra y hermano de Fidel, quien de facto viene asumiendo la jefatura de Estado desde que Fidel cayó enfermo.
Todo puede pasar, tras las bambalinas del poder en la Cuba del siglo XXI, porque las diferentes tendencias, tanto conservadoras como aperturistas en el seno del Partido Comunista cubano, ahora buscarán ganar posiciones.
Precisamente, una de las caras más “amables” de este proceso de renovación de cuadros es representado por Carlos Lage, considerado por los propios ciudadanos cubanos como el sucesor ideal de Fidel, debido a su habilidad para el manejo de los asuntos del Estado.
Aunque el viejo y enfermo Castro, fue claro que se aleja del poder porque ya cumplió su ciclo vital al frente del régimen, que encabezó por casi medio siglo, la verdad es que desde su lecho de descanso aún mueve los hilos del poder y sabrá mover sus fichas para colocar al hombre que represente la continuidad de un castrismo sin Castro.
Ya sea Raúl o Carlos, la transición en este país se avisora sin traumas para su régimen. Lo importante para Latinoamérica es que el hermano país inicie una nueva etapa de apertura.
!Hay que recordar que no sólo de pan vive el hombre, sino también de libertad de culto, derecho a la opinión y, sobre todo, a ser elegido y elegir libremente a quienes serán sus gobernantes!