Una empleada de la Embajada de Canadá en París enfermó poco después de llegar por correo un paquete sospechoso a la legación, anunció la policía e indicó que investigaba si había relación entre los dos hechos.
La comisaría central de la policía en París dijo que las autoridades investigan si el paquete contenía material peligroso de tipo radiactivo, biológico o químico.
La avenida donde se encuentra la embajada fue cerrada al tráfico y la misión diplomática no respondió varias llamadas telefónicas.
Las autoridades francesas levantaron posteriormente la alerta NRBC (nuclear, radiológica, bacteriológica y química) mantenida durante casi dos horas en la embajada.
La misiva contenía un tejido empapado de una sustancia aún no determinada y que va a ser analizada en los laboratorios policiales.
La empleada indispuesta había sangrado por la nariz tras abrir el correo, indicaron las fuentes.