La marcha continua de fiestas y celebraciones, que los millonarios de la NBA protagonizaron desde el pasado jueves en la 56ª edición del Fin de Semana de las Estrellas, llegó a su final con un "Viva, Crítica en Línea Las Vegas", el triunfo histórico del equipo de la Conferencia Oeste y Kobe Bryant de MVP.
Nada de lo que sucedió en el apartado deportivo interesó, porque de hecho no hubo nada que resaltar, simplemente se trató de dar "espectáculo" al más puro estilo de Las Vegas -divertir y consumir-con el tradicional programa que presenta la NBA.
El triunfo por paliza de 153-132, del equipo de la Conferencia Oeste frente al de la Conferencia Este, nuevo récord de puntos para un Partido de las Estrellas sin prórroga, y la recuperación de imagen y proyección de Bryant, que fue el líder con 31 puntos, no pasó más allá de la anécdota final de la gran fiesta.
Bryant, que hace dos años vivió la pesadilla de haber perdido toda su imagen y credibilidad después de haberse visto involucrado en el asunto de la supuesta violación a una joven de 18 años en Vail (Colorado), salió de Las Vegas como el gran triunfador.