El juez de la Audiencia Nacional, Baltasar Garzón, recibió una extraña alabanza de parte del abogado defensor del ciudadano español que llegó a Madrid procedente de la prisión estadounidense de la Bahía de Guantánamo, en Cuba, por ayudar a liberar a su cliente.
Garzón reclamó a Estados Unidos al ceutí Hamed Abderramán Ahmad dentro de su investigación sobre Al Qaeda.
Abderramán se convirtió el viernes en el primer prisionero de Guantánamo entregado a un país extranjero para ser juzgado.