En ocasiones, la desesperación por la molesta picada de una avispa u otro insecto, puede provocar que apliquemos los remedios menos convenientes para el alivio de la comezón o ardor.
Exceptuando a las personas que tienen una reacción alérgica a ciertos remedios botánicos, los mejores para hacer en casa son:
- Poner un pedazo de sávila abierta con la parte carnosa en contacto con la picadura o mordedura. Esto aliviará el dolor, reducirá la hinchazón y actuará como antiséptico. Se puede dejar por varias horas y si la molestia persiste, se puede cambiar cada determinado tiempo.
- Poner una rebanada de cebolla cruda o el jugo de la cebolla en el área afectada para aliviar el dolor y reducir el riesgo de infección.
- Poner una cataplasma de barro (hacer una masita de tierra con agua) en el área afectada inmediatamente después de que ocurre la mordedura o picadura. Reduce la hinchazón.
- Aplicar jugo de rábano localmente en mordeduras de araña.
- Poner una cataplasma de ajo con cebolla en mordeduras de hormiga.
- Mojar un pedazo de algodón mojado en jugo de limón o vinagre y aplicarlo como compresa en picaduras de avispas.