El base Chris Paul volvió a mostrar su condición del mejor en su posición con un nuevo triple doble y el veterano pívot Shaquille O'Neal recordó viejos tiempos de jugador más dominante de la liga.
Paul recuperó lo mejor de su inspiración en el juego individual y con el séptimo triple doble de la temporada le dio a los Hornets de Nueva Orleans una victoria fácil de 101-86 ante los Sixers de Filadelfia.
La estrella de los Hornets volvió a estar imparable con su juego y la defensa de los Sixers nada pudo hacer para evitar que aportase 27 puntos, 15 asistencias, 10 rebotes y recuperase siete balones, y lo dejó de nuevo a las puertas de un cuádruple doble, figura poco común en la producción de un jugador dentro de la NBA.
Si Paul estuvo brillante, el alero serbio Peja Stojakovic también salió al campo con su mejor toque de muñeca y aportó seis triples de los 14 que lograron los Hornets (27-14) para asegurar la victoria, que los acercó al primer lugar.