Líderes mundiales y millones de ciudadanos se aferraron ayer a la idea de que es posible un futuro mejor con el ya presidente de EE.UU., Barack Obama, el que más expectativas ha despertado en todos los rincones del planeta en los últimos tiempos.
En su discurso de ayer, Obama envió "claros mensajes de advertencia a quienes hacen el mal y también mensajes alentadores para quienes hacen el bien en el mundo", declaró a EFE el líder de la Comisión Cubana de Derechos Humanos (CCDHRN), Elizardo Sánchez.
Él y otros disidentes cubanos presenciaron en la Oficina de Intereses de Estados Unidos en La Habana (SINA) la trasmisión televisada de la investidura de Obama.
Miriam Leyva, fundadora de las "Damas de Blanco" (familiares de los 75 opositores encarcelados en 2003), subrayó que el Gobierno cubano "debe tomar muy seriamente" la disposición de Obama para "conversar e ir a un mejoramiento de las relaciones".