"Cuando le pegas a una, nos pegas a todas", reza un lema de una campaña interinstitucional para enfrentar la violencia intrafamiliar.
Esta campaña parece no haber calado en la mente de hombres y mujeres que siguen agrediendo física y verbalmente a sus cónyuges.
Un caso de este tipo de violencia fue presenciado por varias personas en la parada de buses en la Avenida B, próxima al bar "Melchi", cuando un sujeto de nombre José Abreu, de 19 años, le pegó a su pareja, Magalys Jaramillo, de 23.
Nadie se metió a defender a la víctima.
La mujer, con hematomas en el rostro, la espalda y los brazos, fue trasladada hasta el cuarto de Urgencias del Santo Tomás, y el agresor fue llevado a la subestación de El Chorrillo.
La violencia familiar pasó de ser una falta administrativa a un delito que conlleva penas de hasta 2 años de prisión.