Ambientalistas argentinos forcejearon ayer con efectivos policiales que intentaron impedirles llegar al puerto de Buenos Aires para realizar una nueva protesta contra el funcionamiento de una papelera en Uruguay.
Unos 300 manifestantes fueron rodeados por cientos de miembros de la Prefectura Naval (guardacostas), que redobló las medidas de seguridad en la zona a causa de la concentración, por la que se produjeron grandes atascos de tráfico.
Las refriegas se desataron cuando los ambientalistas se dirigieron hacia la terminal de la naviera Buquebús, de donde salen los paquebotes que unen a la capital argentina con Montevideo y otros puertos uruguayos, y los guardacostas buscaron impedírselo.
Igualmente, grupos de manifestantes lograron acceder al ingreso a las instalaciones de Buquebús para entregar a los pasajeros folletos con información sobre los efectos nocivos de las papeleras para el medio ambiente.