EDITORIAL
Anomalías y desorganización en las primarias del PRD
La Organización de
las Naciones Unidas, máximo foro de la palabra humana, celebra hoy
el quincuagésimo-tercer aniversario de su creación, mostrando
pujante vigencia, reafirmadores de los derroteros pacifistas que impulsaron
su surgimiento en 1945, a escasos meses de finalizada la Segunda Guerra
Mundial, contienda que llenó de luto y dolor el planeta, sembrando
más de veinte millones de cadáveres sobre la convulsa tierra.
En Panamá, en acto sin antecedentes, las autoridades locales de
la entidad desarrollaron ayer un evento interreligioso que permitió
acoger al alero de las imponentes naves de la Catedral Santa María
La Antigua, inmueble vetusto que construyera hace tres siglos el genio del
Obispo Francisco Xavier Luna y Vitoria, las palabras sensitivas y autorizadas
de nueve representantes de las iglesias universales, quienes con palabra
precisa, en adecuado tono, elevaron plegarias por la Paz del mundo, y relievaron
la misión fraternal que reúne a los hombres de la tierra,
en los derroteros de las Naciones Unidas.
Las invocaciones religiosas de los jefes espirituales del islamismo,
de los Bautistas, Hosanna, Baha'i, Catolicismo, Episcopal, e hinduismo,
en sus propios idiomas, con sus respectivos atuendos, renovaron las esperanzas
en la bondad divina, y reclamaron las búsquedas de respetuosas obediencias
a los mandamientos que permiten la realización plena del creyente,
y su acercamiento a Dios.
La Fraternidad de la Fe que sustenta el acto catedralicio permite a los
asistentes conocer ideas, conceptos y criterios que conforman las iglesias
del mundo representadas, y donde resaltó con fortaleza la concepción
islámica del Corán, credo que significa Verdad, que proclama
el compromiso de transitar el camino recto, con tolerancia, en búsqueda
de la verdad activa, que exige equidad y rectificación frente a la
injusticia y la opresión.
Las Naciones Unidas atiende hoy responsabilidades múltiples en
los propósitos de asegurar la paz en el globo terráqueo, desterrando
las formas violentistas, del armamentismo desatado, equívoco que
sustituye el diálogo y la armonización por los truenos mortales
del cañón y los fusiles negadores de la condición fraternal
que anuda a los habitantes del mundo.
La organización de las naciones enfrenta limitaciones y carencias
múltiples surgidas de las obligaciones impagas y las crecientes exigencias
del acontecer mundial; razón que justifica plenamente reclamar los
cumplimientos financieros en mora, y asimismo, el alcanzar respaldo consensuado
para los eventos pacificadores que sus funcionarios realizan en los cuatro
puntos cardinales de la tierra, desterrando el fantasma guerrerista, ofensivo
y diabólico.
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| AYER GRAFICO |
| El ejemplar Cyclone Malone gana el clásico La Prensa, dedicado a
los periodistas. |
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