Las armas de fuego siguen siendo las más utilizadas en los asesinatos que se han cometido en el 2009.
De los 497 asesinatos ocurridos hasta agosto del 2009, en 412 se han utilizado armas de fuego, lo que representa un 82% de los casos.
Según el Sistema Integrado de Estadísticas Criminales, 59 homicidas han utilizado armas blancas para acabar con sus víctimas, y 9 han usado algún objeto contundente, y 17 otra fuente.