Radamés Cueto, de 33 años, fue asesinado de tres disparos en las cercanías de su hogar, en Villa Catalina, en el corregimiento de Juan Díaz.
Cueto laboraba como celador en el Colegio Richard Neumann. Recibió los tiros en la axila, cadera y en la clavícula, que lo dejaron tendido en el lugar de los hechos.