Una muñeca se ha apoderado de las pantallas de los televisores los sábados, ella cuenta con tan solo 25 años y lleva uno viviendo en Panamá.
Su espontaneidad y ocurrencias le han servido para que sea una de las caras de televisión más queridas por los panameños, nos referimos a la "catira" o mejor dicho fula Bettina García, la cascarosa más intrépida que hemos visto en los últimos años.
De una personalidad arrolladora, esta venezonala, quien se considera viajera del mundo, nos relata episodios emocionantes de su vida.
Su infancia la recuerda con mucho amor y cariño, ya que su padre la llevó a recorrer el mundo; mientras que al recordar su adolescencia se llenó de nostalgia, sus mejores amigas se quedaron en Caracas.
Lo que nunca ha abandonado son los valores que le inculcaron sus padres Rafael García (abogado) y su madre Evelin. Estos le sirvieron para que formara un brillante futuro del que ya está gozando, pues llegó al mundo de la comunicación hace años. Bettina hizo sus pinitos en su querida Caracas en la emisora "Kyz".
A esta estación radial llegó antes de graduarse de una universidad católica.
�Y COMO LLEGO A PANAMA?
Su llegada a Panamá fue un proceso largo que duró tal vez más de un año. "Nos vinimos a Panamá porque ya la situación en Venezuela estaba muy fea. Recuerdo que la decisión la tomó mi papá, ya que la violencia había llegado a todos los lugares. Yo vivía en un lugar muy tranquilo, y un domingo asesinaron a un señor cerca de la casa. Eso dio la voz de alerta a mis padres que no querían que nosotros (Yo y mis hermanos) creciéramos con eso. Ya no podíamos salir en la noche en auto, te podían secuestrar", recordó la chica.
Luego de ese episodio, su padre viajó a España y Costa Rica a buscar residencia, pero no le gustaron, la última opción fue Panamá.
Una vez que pisan Panamá se enamoran y deciden radicar aquí. Para ese entonces, Bettina vivía en Francia, donde estudiaba francés. En un principio, a la cascarosa no le gustó la idea y les dijo a sus padres que solo vendría (Panamá) a ver y que si le gustaba se quedaba, si no, se iría.
Pero el destino estaba escrito, el mismo día que llega a Panamá el 3 de julio del 2007, se deslumbra por el parecido con su tierra y decide quedarse. "Además del parecido de los panameños con los venezolanos, me instalé por la libertad con que se vive aquí. Ya mis padres pueden dormir tranquilos".
No pasó una semana cuando un amigo en común de ella con Davis la recomienda para un casting en La Cáscara. Lo hizo tan bien que se hace cascarosa.
LO MAS DIFICIL DE SER CASCAROSA
Para esta chica, trabajar en La Cáscara fue un reto, sobre todo porque nunca había hecho un programa de humor. "Me fue difícil los primeros días porque no entendía los panameñismos como "áyala vida".
DESCOMPLICADA Y PRACTICA
Bettina es una chica que no se ahoga en un vaso de agua, un jeans y blusas son sus atuendos. Aunque dejó claro que le gusta cuando la invitan a fiestas, pues le encanta vestirse con trajes.
En cuanto a su cabello, se lo cuida muy bien, pero no es amante de ir todas las semanas a la sala de belleza.
LOS AMORES
Además de amar sin límites a su familia, padres y hermanos (Gabriela y Rafael), su corazón en estos momentos tiene dueño, un español llamado Ciro, con quien lleva ya varios meses.
DATITOS
- Su nombre proviene de una muñeca de su mamá llamada Bettina. Es de colección alemana.
- Jugó muñeca hasta los 16 años.
- Odiaba la escuela, pues era de monjas.
- Es amante de los animales. En una ocasión tuvo chivo, galápagos, perros y conejos.
- Uno de los bisabuelos de Bettina es panameño.
- Su perfume favorito es Emporio de Armani.
- En estos momentos no piensa regresar a su país a pesar de que lo ama y lo extraña.